Mara: ¿Habrás perdido la capacidad de asombro?
Hace unos días regresé de un viaje preguntándomelo. He tenido la oportunidad de pasar dos semanas de invierno, con temperaturas diurnas alrededor de los 30ºC y que por la noche no bajaban de los 25ºC, para mí, temperaturas ideales comparadas con las del invierno leonés.
Nada más llegar, el impacto de los edificios, desafiando a la ciencia por sus enormes dimensiones y formas, te deja perpleja. Tu cabeza parece que está afirmando constantemente, no paras de subir y bajar la mirada. Cuando pasan unos días esos bosques de rascacielos espectaculares ya te parecen algo normal. Las preguntas son otras:
_¿Cómo es posible que unos lugares prácticamente desérticos dedicados a la pesca y al buceo de las perlas, en menos de medio siglo hayan pdido construír tanta belleza y se encuentren entre los más ricos del mundo?
La respuesta todo el mundo la sabe: "El Oro Negro".
Sí, vengo de los Emiratos Árabes Unidos donde el número UNO es lo más escuchado:
-El rascacielos más alto del mundo.
-El edificio más inclinado del mundo.
-El diamante más grande del mundo...
Y... Suma y sigue.
Hemos visitado Dubai y Abu Dhabi y alguna otra ciudad, menos importante como Al Aín.
Tanto Dubai como Abu Dhabi tienen dos partes bien definidas. Una parte acabada y otra en construcción repleta de grúas y máquinas de todo tipo. Así no es de estrañar que la mayoría de la gente que trabaja allí son extranjeros: indios, paquistaníes, turcos... toda una variedad de personas de todas las partes del mundo, junto con los mejores arquitectos, aparejadores, diseñadores...
No hay nada del mundo moderno, que no te encuentres allí.
¡Hasta el museo de "El Louvre"!, que, aunque no tiene nada que ver con el de París, custodia obras muy importantes de todas las partes del mundo.
Bien, pues cuando ya dudaba de mi capacidad de asombro y la de mi nieta que me acompañaba junto con un grupo de 40 personas, visitamos la Mezquita del Jeque Zayed y ahí literalmente nos quedamos con la boca abierta. ¡Es como estar soñando!
Magestuosa, asombrosa y maravillosa obra de arte. Te cautiva tanta belleza, tanta simetría, tanta armonía, tanta pulcritud, tanta luminosidad, tanta...
Se puede orar en cualquier rincón del mundo, pero hacerlo sobre la alfombra más grande del mundo en la Mezquita de las Flores, o Mezquita Blanca, como también se le llama, supongo que ha de ser verdaderamente una experiencia religiosa, como canta Enrique.
Mi nieta cumplió en los Emiratos su 19 cumpleaños bañándose en el Golfo de Omán. Una celebración que seguro, recordará siempre.
¡Me encanta la arquitectura árabe! De repente vienen a mi mente de sombra Granada y Córdoba, su Mezquita y su Alhambra respectivamente.
Nada que envidiar: "¡Granada!,¡ Dulce Granada!; ¡Era la Arabia su abuela! Arriesgarían un mundo los moros, sólo por ella" escribió Víctor Hugo.
Imagen tomada de Google
Desde luego describes un viaje para epatar a cualquiera, es un mundo desconocido que en los documentales nos deja maravillados, así que en vivo debe haber sido maravilloso. Felicidades por tan exclusivo viaje
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