¡¡¡Mi abuela, mi madre y el Beti !!! Así gritó ante un micrófono, el pasado sábado, uno de los aficionados del Betis ganador. Me pareció un hermoso regalo a las madres para cualquier día del año.
No hace muchos años se celebraba el Día de la Madre el 8 de diciembre fecha de la Inmaculada. La iglesia, trasladó ese día al primer domingo de Mayo. En su opinión los fieles celebraban más a la Madre terrenal que a la Madre del cielo, o sea a la Virgen. No le salió bien el cambio, porque las personas siguen celebrando en familia el Día de la Madre y se nos olvida el día de la Inmaculada.
Sea cual sea la fecha, la mayoría de las personas recordamos de forma entrañable a la mujer que nos dio la vida; viva o ya no viva entre nosotros, como es mi caso. Muchas veces me he preguntado por qué mi madre tuvo que sufrir tanto para dejar este mundo y he llegado a una conclusión:
Porque se olvidó de sí misma. Ella siempre estaba "fuera del círculo" ocupándose de todos los que formábamos parte de él para solucionar nuestros problemas y que nada nos faltara: a mi padre, a mis hermanos y a mí, junto con sus 17 nietos, sus padres, sus hermanas... Siempre encontró tiempo para tod@s menos para ella.
¡Ese fue su gran error! En mi opinión. Nunca se ocupó de ella, ni de su enfermedad en un principio, cuando lo hizo, ya era demasiado tarde. Sus fuerzas dejaron de sostenerla, no podía ayudar y se sentía mal por tener que ser ayudada.
Se fue de este mundo preguntándose: ¿Por qué a mí?
Mi padre al contrario, siempre estaba dentro del círculo, en el centro, ocupándonos a todos a su alrededor. Para él la vida era el trabajo. Todo lo demás era secundario. Vivió conforme a su pensamiento. Trabajando mucho y aceptando lo que venía. Ya en la vejez comprendió que el trabajo no era todo en la vida, pero se sentía bien de haber vivido según su pensamiento.
Nadie debe ocuparse tanto de los demás, como para olvidarse de sí mismo. Ni siquiera una Madre. No es egoísmo como la tradición cristiana nos ha inculcado. En mi opinión. Nosotros somos los más importante, antes que todo lo demás.
Feliz día a todas las Madres: "Conservar algo que me ayude a recordarte sería admitir que te puedo olvidar" William Shakespeare.