¡Yo soy!
Tomo un zumo a las puertas del bar. Una pareja de mediana edad, a mi lado toma unas "claras" en silencio.
Se acerca un viejecito alto y escuálido. Yo diría un "Chiquilicuatre" sin el tupé y les dice al matrimonio:
_¿Quieren que les recite una poesía a cambio de unos euros?
_No, no, _contesta el hombre _¡Vaya tontería! ¡Una poesía!
_La verdad es que él sí que es todo un poema _añadió ella.
A mí me sorprendió la pregunta y no me pareció una tontería. Alcé mi sombra le seguí por la estrecha calle que va a dar a San Isidoro. ¿Le oiría recitar algo? No. Se metió en un bar y yo ya no quise entrar tras él.
Recordé una frase: "¡No te rías de las tonterías de los demás! Pueden representar una oportunidad para ti" de Winston Churchill.