Fosco

 

 Fosco, es el perro de  la familia formada por el matrimonio y dos hijos, un varón y una hembra. Le llamaron así porque su pelo es más bien oscuro. Toda la familia estaba muy entusiasmada con  él.

 Fosco los quería a todos, pero está especialmente encariñado con María, la madre y señora de la casa. Sucedió que María se tuvo que ausentar durante un mes a otra localidad para cuidar de su madre que debía someterse a una operación. 

Pasado el tiempo de recuperación de su madre, María regresó a su hogar. Fosco, al verla, se abalanzó  con el pene erecto sobre ella de una forma que jamás había tenido lugar en la familia. 

Aquel estado de ansiedad no cesaba. Le llevaron al veterinario que le puso una inyección para disminuir su excitación sexual. Nada. Le sometieron a una operación que pusiera fin a aquel frenesí sin resultado alguno. Después de un mes, Fosco murió sin que su pene volviera a la normalidad dejando desolada a la familia. 

Para ellos, Fosco murió de amor por su dueña: "Si tener alma significa ser capaz de sentir amor, lealtad y gratitud, los animales son mejores que muchos seres humanos" de James Herriot.