Sí, hablo sola muy conscientemente, no me avergüenza decirlo. Diariamente mientras doy vueltas por la cochera, hablo sola porque nadie me oye. La perorata o soliloquio se convierte en una macedonia aderezada con frases y algún que otro taco.
Hasta que no la pusieron obligatoria me negué a llevar mascarilla. Mi hermana erre que erre que los asintomáticos también podemos contagiar. Ya lo sé, pesada. Ahora resulta que también por la conjuntiva de los ojos se puede contagiar el virus. Pues apaga y vámonos: gafas, mascarilla, guantes... Mejor ponemos un burka y acabamos antes. ¡De puta madre! Vaya mala pata lo de la prima, pasando la cuarentena en Palencia. Tienes que aceptarlo, perder un ser querido es duro, pero pasar la vida de hospital en hospital y de operación en operación tantos años es un sufrimiento aún mayor. Hiciste todo lo posible por ella, así que ahora mira por ti muévete y haz ejercicio. Dice que lo hace en casa subiendo y bajando escaleras desde un cuarto piso. Con su peso cuando las baja ve las estrellas. ¡A quién se le ocurre! ¡cómo no te va a doler! Ya le dije baja en el ascensor y luego ya sólo subes las escaleras, de lo contrario te vas a destrozar las rodillas. A mi compañera Maru le han desconectado el teléfono fijo. Tiene principios de alzheimer, hablaba con toda persona desconocida y le abre la puerta a cualquier vendedor. La llamé al móvil. Aún razona, habla, repite y repite lo mismo una y otra vez cuesta desconectar ¡Pobrecilla!. Pienso que en su caso, preferiría que me llevara el virus antes que perder la razón. Al llegar de la pelu, mi marido me muestra un frasquito de higienizante de manos para que se lo eche a la mascarilla, le digo que no, que sólo es para las manos. Las mascarillas se espolvorea con alcohol de 90º. ¡Porque tú lo digas!, si éste tiene un 70 % de alcohol. ¡Será posible! Luego le pregunté algo y no me contestó, me sienta fatal. Se está volviendo un morugo. Le dije a mi madre que sólo me casaría con uno que supiera bailar. Escupí "pa" arriba y me cayó todo encima. Nos casamos muy enamorados. Los primeros años siempre íbamos al baile, pensé que con el tiempo... Nada, lo que Dios no da... Como bailar con el palo de la escoba. Ya está el bombero con la moto a cien, no pone un huevo en casa. ¡Menuda cuarentena! Con la moto a dar una vuelta o con el coche o con el perro. Ya dice mi hija que cuando viene a casa siempre se lo encuentra. Otra, que si mi nieta la tiene harta que no da un palo al agua, que se acuesta muy tarde y hace mucho ruido con las puertas ... Estoy hata los put...cojon ... ¡Qué fina! La escucho y pienso "Igualito que tú a su edad. Sigue. Que si los deberes, las redes, las salidas a una hora con una y a otra con otro... Y me salta: ya, como tú estas tranquila. ¡¡Pues claro que estoy tranquila!! Los hijos por naturaleza son egoístas. Mara, acuérdate que cuando tus hijos eran pequeños y te surgía algo, se los llevabas a tu madre y ni siquiera la llamabas primero. Me acuerdo que una vez llegué con los cuatro y mi madre se había ido a Astorga. Hasta me pareció mal. Luego pensé en lo egoísta que era. Pues vaya con lo de Benilde, ellos están en el chalé. Su hijo les lleva la compra. Se la deja en el cobertizo y desde cinco metros les dice que no la toquen en dos o tres días. ¡Será exagerado! Claro como su novia es enfermera... Pues lo de Lidia, al regreso de la compra se desnuda, se ducha y se cambia de arriba a abajo. Nos estamos volviendo hipocondríacos totales. Yo no digo que eso lo hagan los sanitarios, la policía, los soldados, pero todo el mundo. La higiene y la limpieza es indispensable pero si exageramos pronto cogeremos otro virus aún mas resistente. Sólo somos hoy, ahora, en este momento, así que ...
¡¡Nada, que hablo sola!!
Conscientemente: "Ama lo que tienes antes de que la vida te enseñe a amar lo que perdiste" Proverbio chino.
Me parece un mal cada vez más corriente, suponiendo que sea un mal, que ya es mucho suponer.
ResponderEliminarBesos.
Alfred, para mí no es un mal porque se desahoga una, eso ya es bueno y no se hace mal a nadie. Un abrazo.
EliminarEstá bien... Hablar sola puede ser un efectivo ejercicio.
ResponderEliminarUn gran abrazo.
Sí, Sara, y no se perjudica a nadie. un beso.
Eliminar¡Qué será ese duende que tenemos en la cabeza que no para de hablar y hablar llevándonos de una cosas a otra sin descanso! Bueno, me quedo con la última frase que es muy buena.
ResponderEliminarBesos, Mara
Rita, si tenemos la facultad del lenguaje será por algo así que hemos de ejercitarlo a nuestro modo y manera. Besos.
EliminarLo menos que debe uno lavarse las manos al día son ¡25 veces! me parece todo muy exagerado Yo la voy llevando sin tanto estrés.
ResponderEliminarUn abrazo Mara
Haces muy bien MaLque, no hemos de tomarlo todo al pie de la letra o terminaremos todos de psiquiatra. Un beso.
EliminarYa puedes hablar solo o a voces, hoy nadie escucha.
ResponderEliminarSaludos
Ja, ja, Emilio, tienes razón, oír oímos pero escuchar... eso ya es otro cantar. Un abrazo.
EliminarHay quien dice que al vocalizar un problema este consigue empequeñecerse. Hace como treinta años aprendí a hablar de lo que me estaba pasando, incluidos los extraños, y cuantas más veces me escuchaba contarlo menos me costaba enfrentarme a él.
ResponderEliminarYo también hablo sola de vez en cuando... sigo haciéndolo. No es que sea la panacea pero al menos consigo "discutir sin pelear" que no es poco.
Saludos Mara.
Pues sí Maile a mí me parece una buena terapia, y como tú dices se evitan peleas con peore consecuencias. Un abrazo.
EliminarYo también hablo solo. ¿Hay alguien que no hable solo?
ResponderEliminarSalu2.
Je, je, Dyhego por lo visto somos un montón y en las circunstancias actuales aún no necesitamos más. Un abrazo.
EliminarSabes, tú habla que yo te escucho :))
ResponderEliminarUn abrazo!
Hola Carmela, por fin alguien escucha. Porque oírnos nos oye mucha gente pero escucharnos es harina de otro costal. Un beso.
EliminarPues ha sido largo el discurso... No exento de realismo. :)))))
ResponderEliminarAbrazos Mara. Una vueltecita por Ordoño te puede posibilitar partener para el diálogo.
Hay días que es mucho más largo Ernesto y si más de un@ me oyera se taparía los oídos. ¡Menos mal que por fin podemos darnos esa vueltecita! Un abrazo.
ResponderEliminarOlá querida Mara.
ResponderEliminarAndamos todos um pouco loucos!
Neste mundo de confinamento.
Um doce abraçar.❤️
Megy Maia🌈
Hola Megy, gracias por tu visita y por seguirma. Sí es verdad andamos todos un poco perdidos. Saludos.
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