Suben y suben...

 

¡Sí. A los precios les gusta el ascensor! La Primavera por fin nos ha traído el buen tiempo. Las noticias sobre el turismo en España vuelven a ser alentadoras. Algo de lo que nos alegramos todos. Pero los precios suben y suben. 

Los restaurantes aumentan los precios a una velocidad que pronto cualquier celebración la tendremos que hacer en casa porque el presupuesto no llega para salir fuera. Ya ni agua gratis te sirven. Cierto que las materias primas suben pero la moderación es una gran virtud a cualquier nivel. 

En el restaurante, miro para la mesa de al lado.  Un matrimonio mayor ha pedido un plato que la señora trata de adivinar lo que es, ya que por el nombre no se aclara, va diciendo en voz alta los nombres de ingredientes que intenta descubrir y añade: Es como una ilusión óptica con la que se nos engaña haciéndonos creer que es algo distinto a lo que en realidad es. El señor, que tiene cara de malahostia, le espetó: "Bastante sabes tú de pájaras preñadas". Como si por elegir un plato caro y original ya tuviera que estar muy bueno. 

En ése momento vinieron a mi mente de sombra los consejos del aclamado cocinero británico, ganador de estrellas Michelin Gordon Ramsay, un chef sin pelos en la lengua: "Evite los platos especiales, sospeche de cualquier alarde extravagante y prepárese para regatear por el vino". Tres consejos en mi opinión interesantísimos para llevar a la práctica. 

Tomemos nota, no por más sofisticado un plato ha de estar más sabroso. A veces, por qué no, nos gusta experimentar, aunque luego llevemos una decepción. Mi sombra casi siempre se inclina por la cocina tradicional rica y variada. ¡Todo me gusta de ella! Claro que los  inventores de dolencias, convencen a los sanos de que estamos enfermos con sus prohibiciones: No al picante, no a las grasas, no a los dulces...

 Siempre sigo el lema de Arguiñano: "Comer un poco de todo y mucho de nada" 

Tenemos demasiada información en este aspecto y a veces contradictoria pero.. Podrán cortar todas las flores pero no podrán detener la primavera" de Pablo Neruda.