En verdad no sabes el seguro que tienes hasta que no lo necesitas.
A .F. tuvo hace años un desprendimiento de retina que le fue operado con éxito por el Dr. Pertejo con el visto bueno de la compañía ADESLAS.
Recientemente A. F. tuvo de nuevo en el mismo ojo necesidad de una operación más complicada y el Dr. Pertejo seguía perteneciendo a la misma compañía y gozando de su confianza, por lo que acudió nuevamente a él. Cuando solicitó autorización a la aseguradora para realizar la operación, permitía que fuera el doctor mencionada quien la realizara, pero no en su clínica donde él trabaja habitualmente, sino que tenía que acudir al hospital Nuestra Señora de la Regla, donde no disponían de aparatos para realizar una parte de la intervención.
Conclusión: El doctor Pertejo no estuvo de acuerdo en sacar sus propios instrumentos de precisión de su clínica para llevarlos a otra, y está en todo su derecho. Por su parte la compañía no dio su brazo a torcer, a no ser que estuviera dispuesto a ponerse en manos de otro doctor y se trasladara a otra ciudad. El enfermo de 76 años, decidió abonar los 4.500 € de la operación al doctor Pertejo, con la esperanza de recibir sino todo, sí alguna compensación económica por parte de ADESLAS su aseguradora.
Al cabo de dos meses al enfermo tuvo que realizársele una nueva intervención en el ojo. ¿Por qué? ¿Quedó algún cabo suelto en la primera operación? Todos pensaríamos que algo salió mal y si necesitaba una nueva intervención se debería realizar sin más aportación económica por parte del paciente. Pues no fue así, o lo tomas o lo dejas.
De nuevo una segunda intervención realizada por el mismo doctor, por la que A. F. abonó 1500 € . Total, 6.000 € de los que ni ADESLAS ni MUFACE (Mutualidad de funcionarios) aportaron un sólo euro. Teniendo en cuenta que entre A. F. y su mujer, también funcionaria, han cotizado 70 años a la Mutualidad. ¿Mereció la pena? ¿Las aseguradoras tienen en cuenta el expediente del cliente? ¿Hay ética en los médicos cuando el enfermo recurre a ellos de forma privada?
Mutuas y médicos: "Sólo el médico y el dramaturgo gozan del raro privilegio de cobrar las desazones que nos dan" de Santiago Ramón y Cajal.
Tremenda injusticia que quedará impune.
ResponderEliminarUn saludo.
Así es de injusticias está el mundo lleno. Saludos.
EliminarSiempre se ha dicho que los seguros se contratan con la esperanza de no tener que necesitarlos y es que cuando recurres a ellos tropiezas con sus injusticias. Suerte y abrazos
ResponderEliminarPues sí, Ester es entonces cuando de verdad se da uno cuenta de lo que tiene, pero ya no hay remedio alguno. Un beso.
EliminarLas Mutuas, aveces se tienen por falta de confianza en el sistema sanitario, que podríamos contar casos y casos, pero esta claro que una mutua no tiene nada de altruista son negocio, y puro negocio..
ResponderEliminarUn abrazo Mara...
Estoy muy de acuerdo llorenÇ de que son puro negocio pero eso no debería de impedir que se comportaran bien con el cliente, algunas lo hacen. Un saludo.
EliminarHola Mara, esta claro que mientras no se necesita a las aseguradoras todo bien y cuando surge algún problema como es el caso que nos cuentas todo son problemas, en cuanto esta el dinero por medio pasa lo de siempre, y los médicos serán muy buenos pero de ética me parece que nada de nada, casi todos están en la seguridad social, pero cuando surge una operación así, por que la hacen en sus consultas privadas?, por eso la ética me parece que la tienen donde te puedas imaginar.
ResponderEliminarBesos.
Sí, Piruja, los médicos están pluriempleados de lo público cobran un sueldo y de lo privado lo que quieren porque no hay unos límites. También creo que falta ética. Un beso.
EliminarSe queda uno con los pelos de punta...
ResponderEliminarQue mundo tan injusto... Que inmensa pena que las compañias sanitarias no sean sino compañias de seguros, con todo lo que eso implica...
Un abrazo
sí idelfonso, les mueve el dinero y sólo el dinero, además en las circunstancias en las que se recurre a ellas no tienes elección. Saludos.
EliminarLa "putada" es que han privatizado nuestras vidas y parece que seguimos sin enterarnos de la película.
ResponderEliminar¡Que todo salga bien!
Besines utópicos, Irma.-
Y qué "putada" privatizan la salud, privatizan la educación, privatizan la asistencia... y si nos enteramos, con el panorama que tenemos "apaga y vámonos" Abracines.
EliminarMadre mía, Mara, me dejas alucinada. Yo tuve un seguro de La Caixa cuando vivía en España y no tuve problemas. Habrá que andar con cuidado.
ResponderEliminarBesos, guapa.
Tuviste suerte Celia, algunas veces cumplen, pero en general... no son de fiar. Un beso.
EliminarEl problema debe de ser que Muface está en "horas bajas" y cuando escasean los recursos ya se sabe lo que ocurre.
ResponderEliminarTodo el sistema está en horas bajas Helio y al paso que vamos, sólo viven bien las farmacéuticas. Un abrazo.
EliminarYo hasta ahora no he tenido ningun problema con la asegurado donde siempre me han dado un trato exquisito incluso cuando me han tenido que operar, facilitando que mis familiares también estuvieran en las mejores condiciones.
ResponderEliminarNo puedo decir lo mismo de la seguridad social... pero eso es un caso aparte.
Besos
Me alegro por ti, Ilesín, pero hay cada caso que clama al cielo. Un beso.
EliminarCompletamente de acuerdo con Don Santiago Ramon y Cajal
ResponderEliminarCariños
Yo también Abu, cómo no. Él, como era médico, sabía lo que ocurría. Besitos.
EliminarEs cierto, porque uno casi nunca lee las letras chiquitas del contrato....igual pasa con los seguros de los carros...qué pena!
ResponderEliminarBesos
Sí, Liliana, mi hija dio un golpe a la puerta de la cochera con su coche. Fuimos con la verdad y claro en la letra pequeña ponía que si era familia no había nada que hacer. Cambiamos de seguro pero ya veremos. Abrazos.
Eliminarlas compañías de seguros vas a sacarte hasta el último céntimo. Lo de menos es la salud. Lo de más es el negocio.
ResponderEliminarPor desgracia.
Así es Dyhego y no podemos hacer nada, porque cambiamos a otra y cuando hay un problema te hace lo mismo. Saludos.
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