Ilustración tomada de la Red. |
_Lo ideal es ponerle una dentadura nueva porque las piezas que le quedan están muy mal.
_Lo que usted decida doctor.
_Bien, tiene dos opciones: Ponerse una dentadura móvil o una fija.
_¿Cuál es la mejor?
_La mejor es la fija pero resulta mucho más cara.
_A Dios gracia tengo una buena paga, doctor, así que ...
_Bien, si es así, hoy le sacaré algunas piezas. Le haremos un presupuesto. Si lo paga al contado tendría un buen descuento. Le advierto que el proceso lleva su tiempo y a veces es doloroso.
A veces no, doctor, _opina mi sombra_ siempre es bastante doloroso por lo que yo conozco. Sagrario pagó al contado. Más de uno pensó que no llegaría a tener su nueva dentadura.
El proceso duró más de un año. Pasó meses casi sin poder hablar, ni comer, sólo purés. La anciana soportó un gran sufrimiento, apenas salía de casa. Atiborrada de antibióticos para evitar infecciones y antiinflamatorios pata calmar el dolor que no la dejaba apenas dormir.
Poco a poco Sagrario comenzó a mejorar y ... Poco antes de cumplir los 98 años... falleció. Las personas que la conocíamos comentábamos. ¿Cómo se decidiría a ponerse la dentadura fija a su edad con lo mal que lo ha pasado?
Mi sombra se pregunta: ¿Es ético hacer sufrir así a una persona de esa edad, cuando hay remedios mucho menos dolorosos? ¿Falleció Sagrario por los implantes y la medicación recibida? Prefiero pensar que por edad, pero la duda está ahí.
Para mi sombra hubo falta de ética: "Es peor cometer una injusticia que padecerla porque quien la comete se convierte en injusto y quien la padece no" de Sócrates.
Con la cita de Sócrates queda todo dicho.
ResponderEliminarUn abrazo.
Pues sí Alfred, aquí el médico es el injusto pero la que lo sufrió fue ella. Abrazos.
EliminarEl dentista era un sinvergüenza.
ResponderEliminarSaludos
Algo de eso había Emilio porque por lo menos le había de haber dicho los riesgos. un saludo.
EliminarQueda la duda. Pero ella, a sabiendas eligió los implantes, que poner los dientes debe ser la peor de las torturas, más a una edad donde duele hasta el alma. Un abrazo. Carlos
ResponderEliminarPues sí Carlos lo eligió ella, pero la verdad le faltó información suficiente. Abrazo.
EliminarNo se que decir, conozco a personas, mayores, que se han puesto la dentadura fija y si bien es un proceso largo no es tan siniestro com el de tu protagonista. Una pena que no la pudiera disfrutar. Abrazos
ResponderEliminarEster, yo la verdad de esa edad no conozco a nadie, pues han de regenerar hasta el hueso, pero en algún caso como dices puede salir bien. Ella la pobre no tuvo suerte. Un beso.
EliminarCreo que la edad de la paciente no es la mas apropiada para someterse a una intervención de ese tipo, el medico es el que debe asesorar a la paciente sobre la duración y lo complicado de ese tipo de intervención a una edad tan avanzada.
ResponderEliminarUn abrazo.
Yo también lo creo Helio, faltó información y ética. Abrazos.
EliminarPobrecita, Sagrario. Un sufrimiento innecesario.
ResponderEliminarUn abrazo.
Así lo creemos todos los que la conocimos, tanto sufrimiento a esa edad cuando con una dentadura móvil no sería ni la mitad de doloroso el proceso. Un beso.
EliminarPues la verdad es que la podían haber dejado a la muer tranquila, con algún remedio que no fuera tan penoso...¡con lo años que tenía! Hay cada sinvergüenza por ahí...que solo mira el dinero.
ResponderEliminarUn abrazo
Así lo pienso yo Rita, una dentadura de quita y pon hubiera sido más que suficiente. Un beso.
EliminarPobre Sagrario yo ya pasé por eso hace años y es mucho peor que lo de ahora, (de momento), ADG.
ResponderEliminarRelatos del día a día, me encantan, Mara.
Un abrazo
Sufrir tanto a esa edad por algo que se puede remediar de otra forma es poco ético por parte del doctor. Gracias Enrique. Abrazos.
EliminarUna historia delicada, sin duda. Sobre dentistas, hay de todo. La mayoría, eficiente.
ResponderEliminarAbrazos Mara.
Estoy de acuerdo Ernesto, la mayoría eficientes pero al que le toca ha de sufrirlo. Un abrazo.
Eliminarme encanta tu humor tu mente tu sabiduria
ResponderEliminarbeso
Mil gracias RECOMENZAR. Feliz semana.
EliminarDesde luego no parece que la recomendación del dentista fuera la más adecuada para la pobre Sagrario y sí seguramente para su bolsillo.
ResponderEliminarBesos
Conxita, yo así lo creo también. El interés económico en algunos profesionales es demasiado evidente. Un beso.
EliminarBuff...pobre Sagrario. Con esa edad es muy problemático el tema de los implantes.
ResponderEliminarUn sufrimiento añadido para al final, nada de nada.
Hay dentistas y dentista...
Saludos, Mara.
Tú lo has dicho Maripaz, hay dentistas y dentista, la mayoría buenos profesionales pero algunos... Un beso.
EliminarSabes una cosa? Ya no voy al dentista. Me da miedo. Pero no la intervención, lo que me da miedo es la factura. Suerte que no tengo la edad de la pobre protagonista.
ResponderEliminarSaludos.
Ja, ja, Naranjito, si valiera eso yo tampoco. A mí me dan miedo las dos cosas, el dolor y la factura. Un saludo.
EliminarTeniendo 96 años yo no me la pondría seguiria con los puentes, creo que el dentista miró más por su negocio. Me ha gustado tu relato.
ResponderEliminarBesos.
Yo tampoco Conchi, pero al final todos intentamos seguir los consejos del profesional que en este caso dejó mucho que desear. Un beso.
ResponderEliminarDe profesional tenía poco. Aprovechados hay en todos lados.
ResponderEliminarUn abrazo.
Sí, Laura, yo quiero creer que son unos pocos. Un beso.
ResponderEliminarMara:
ResponderEliminarla verdad es que fue una mala recomendación por parte del dentista.
Salu2.
Sí, Dyhego yo creo que le dijo una verdad a medias que es peor. Un saludo.
ResponderEliminar