Los padres de Tere tenían un buen capital. El padre era muy trabajador y derrochador a la vez, por lo que la madre enferma de cáncer hizo testamento y dejó una gran cantidad de dinero a sus hijos que el padre no podría tocar si ella faltaba. Sólo en el caso de que pasara, ¡mucha, mucha necesidad!
La madre murió y dejó además del dinero, su parte del piso a sus dos hijos aunque mientras el padre viviera podría disfrutar de toda la vivienda. Los hijos se emanciparon y vivían en distintas partes de nuestro país.
Con el padre vino a vivir una mujer dominicana que rápidamente se casó con él. A partir de ese momento era muy difícil para los hijos ponerse en contacto con su progenitor. La "mucha necesidad de dinero por parte del padre" sin justificar, llegó pronto a la vida de la pareja y gastaron el dinero que su madre había dejado para los hijos.
Los hijos, se enteraron por los vecinos del fallecimiento y entierro de su padre. Nadie les avisó de la desgracia hasta pasado un tiempo. Una vecina llegó a decir: ¡No me extraña que falleciera con la cantidad de pastillas que le daba su mujer!
Pronto la de Santo Domingo vendió todo lo que había en el piso. Su deseo era regresar cuanto antes a su país. También puso a la venta el piso, sin contar con los hijos, que acudieron al juzgado y consiguieron embargarlo. Así están las cosas. Mi sombra se pregunta:
¿Por qué los seres humanos no se hacen preguntas cuando una mujer extranjera o un hombre, en una relación hablan sólo de dinero? En mi opinión, salvo algunas excepciones, son relaciones interesadas por ambas partes.
Intereses: "Cuando los sentidos faltan, la razón debe intervenir" de Galileo Galilei.
El dinero lo corrompe todo.
ResponderEliminarUn abrazo.
Sí, Alfred, sobre todo la ambición de dinero.
EliminarAbrazo grande.
No hay que ser extranjero para hablar de dinero, muchas de las parejas de hoy se rompen o se eternizan por no llegar a acuerdos económicos, por no poder comprar o alquilar una vivienda, no tener un trabajo, no querer tener hijos ya que suponen un buen gasto, ya no traen un pan bajo el brazo, por no tener un empleo seguro y estar precarizado, etc, etc...
ResponderEliminarSaludos
Toda la razón Emilio, a veces lo económico trae una larga cola de consecuencias. Lo de los hijos nunca me ha gustado lo del gasto, aunque es real, me parece que cada vez hay más miedo a la responsabilidad en todos los sentidos.
EliminarUn abrazo.
Cuando se mete el dinero, y existe herencias entre medios, he sabido de familias que se han llegado a sacar los ojos, con el fin de tomar la mayor parte.
ResponderEliminarSaludos
Estoy de acuerdo Carlos, muchas familias bien avenidas llegan a extremos muy tristes por causas económicas.
EliminarCariñoso saludo.
Lo dijo Alfred en el primer comentario, bien resumido y al pie. Si dejas que el dinero te gobierne, todo lo demás desaparece. Se pierden lazos, se olvidan amores, en las herencias familiares sale lo peor de la humanidad.
ResponderEliminarBesos!
Sí, así es Etienne. El dinero nos da estabilidad pero también creo que es el causante de muchos dramas familiares.
EliminarUn abrazo.
interesante lo que hablas dices comentas eres una genialidad
ResponderEliminarGracias Mucha. Lo habitual de la realidad nada más.
EliminarUn beso grande.
¡"Mardito parné"!
ResponderEliminarEl dinero es fuente de desuniones y problemas, más que de alegrías.
Un abrazo.
Lo corroboro, Mari Carmen ¡Mardito parné! y a la vez que llegue a tantas familias que con la crisis lo están pasando mal.
EliminarBesos.
Cierto que el "dinero" suele contaminar ciertas relaciones... Principalmente las que no están bien "atadas" en algunos momentos relevantes en la vida de muchos.
ResponderEliminarEs evidente que no toda relación, dinero mediante, tiene porque acabar como el rosario de la aurora. Sean de aquí los protagonistas o del Caribe...
Sé que todo consiste, como digo, en el "no atar debidamente" lo que se quiere hacer o que se haga, el día de mañana, y, cómo no, la condición humana.
Real esta última también... Sobre todo si se la deja actuar.
Y por ello una vez más, revisar legalmente ahora, que todo está en calma, lo que se quiere que siga siempre. Si hay "resquicio" por el que introducir algún movimiento distinto al previsto, ¡puede que se haga!
Abrazos Mara. (Deja todo bien atado desde ya!)
A veces depende de las "ataduras" pero en muchos casos de sólidas familias surge la condición humana.
ResponderEliminarDe momento tenemos testamento algo es algo je, je.
Abrazote.
Hay gente así, que desprecia al entorno cercano y confía plenamente en el primer o primera que llega.
ResponderEliminarAsí es, Dyhego, pero lo que yo observo es que cada vez en general confiamos menos y es más difícil confiar en la gente.
ResponderEliminarSaludos.