Sí, sí, preciosa...
Son una pareja de divorciados que se llevan bien. Él tiene nueva pareja y ésta tiene una hija a punto de cumplir la mayoría de edad con la que discute constantemente. Habla por teléfono con su ex. Le comenta que está muy bien, con su nueva pareja y añade:
_Lo que no aguanto son las discusiones de la madre con su hija pero en eso yo no me meto. ¡Menos mal que dice que se va a independizar! Espero que así sea y podamos vivir en paz sin ella.
_Con lo guapísima que es, _añade la que fue su mujer_ por las fotos que publica en facebook le sobrarán pretendientes.
_ Sí, sí, preciosa: lleva las pestañas postizas, lentillas de color azul, labios operados, pechos operados, glúteos artificiales... sí, sí, preciosa... y lo peor es que es guarra, guarra hasta decir basta. No asomes a su habitación, además del mal olor, es un caos con todo por el suelo... El desorden es total. Su madre no puede con ella porque son polos opuestos. La madre tiene obsesión por la limpieza y por eso se pasan el día discutiendo y yo estoy en el medio sin intervenir para no empeorar las cosas. Tenga ganas de librarme de ella de una vez, aunque su madre no la ve preparada para nada.
_Mejor, mejor que no te metas, son ellas las que discuten y entre una madre y una hija si tomas cartas en el asunto suele ser peor, porque sea como sea, las madres siempre se ponen de parte de los hijos.
La conversación continuó por otros derroteros. Tanto la obsesión por la limpieza y el orden como el mayor caos son extremos y a mí los extremismos no me gustan.
Estoy en desacuerdo con la frase: “Más quiero la injusticia que el desorden” de Goethe.
Hola, buenas tardes, me has dejado pensando en el tema de las discusiones con los hijos, siempre las hay, tengo dos hijos una mujer y un varón, cuando vivían conmigo siempre había discusiones, por distintos temas, y ahora que cada uno vive en su casa, muchas veces discutimos por WhatsApp porque todos tenemos diferentes puntos de vista, pero lo lindo es después disculparse, y decirnos que nos queremos, es la vida, no conozco familias donde no haya discusiones, saludos. Patricia F.
ResponderEliminarToda la razón Patricia, lo bonito es disculparse por fuerte que haya sido la discusión. Un abrazo.
Eliminar"Ni tanto que queme al santo, ni tan poco que no lo alumbre". La frase de Goethe, parece que era ordenado a morir.
ResponderEliminarUn abrazo.
Bonito refrán Sara, para mí es nuevo. Pues sí en el término medio está mayor parte de las veces la razón. Un beso.
EliminarLo de no meterse por medio cuando una madre discute con su hija, eso lo he aprendido a palos, cuando lo hacia ¡¡jolín!! me llovía fuego, las dos se volvían contra mí como si yo fuera el generador de la discusión, lo de quedarme fuera lo aprendí tarde, pero lo aprendí, ya no me meto, espero a que escampe.
ResponderEliminarSaludos
Ja, ja, ja, Emilio, tal como lo dices me has hecho reír. Buena decisión esperar a que escampe, me encanta esa expresión.
EliminarUn saludo.
En cuanto a la cita, habría que leerla en el contexto en el que se produjo la frase, pero si se estudia un poco a Goethe nos surge un personaje ultraconservador que visto así no sorprende la frase que podría ser dicha hoy por cualquier de VOX o incluso más al extremo.
ResponderEliminarSaludos
Sí, la cita quizás cambie en el contexto original. Por eso a mí no me gusta VOX ni un pelo.
EliminarAbrazo.
Eses discusiones en toda casa han existido. Tengo dos varones y cuando se liaba, Paco era mero espectador. Tampoco me gustan los extremos, creo que no son buenos
ResponderEliminarUn abrazo.
Hola Laura. Yo discutía mucho más con mi hermana y cuando se metía mi padre se acaba pronto porque no se andaba con chiquitas.
EliminarUn beso.
La injusticia es difícil de remediar, el caos no.
ResponderEliminarYo tampoco creo que los extremos sean buenos.
Salu2, Mara.
Muy difícil Dyhego, pero el caos trae injusticia porque si tú ordenas y alguien no respeta el orden del que disfruta me parece super injusto. Siempre que no haya extremos.
EliminarUn abrazo.
pues vaya, la hija es una joya! no dan ganas de echársela de novia, no. ;)
ResponderEliminarel afán por la limpieza está bien hasta cierto punto, porque hay personas que se ponen un poco déspotas con ese tema.
en cuanto a las discusiones familiares, un día estaba dando una clase al menor de tres hermanos. en un momento dado, a través de la puerta empecé a oír al hermano mayor echándole una bronca a gritos al mediano, y resultaba tan cómico que tuve que morderme los labios para no reírme y continuar dando mi clase como si nada. ^_^
abrazos!
Je, je, Chema, una joyita para darle de comer aparte. Estoy contigo en lo de la limpieza. Sí, sí, podían pensar en ti que les podías oír pero hay discusiones que no se paran por nada.
EliminarUn abrazo.
El problema es que vivimos un tiempo donde la juventud en general vive la vida de un modo distinto al nuestro, cuando llegan a la adolescencia puede ser un quebradero de cabeza para los padres.
ResponderEliminarLo que no entiendo es que siendo menor de edad le permitieran y le costearan ese tipo de operaciones estéticas.
un abrazo.
Helio. Es curios con mis seis nietos adolescentes unos dan guerra y otros no, se ve que a cada uno le llega su tiempo.
EliminarLa edad se aconseja a los 18 o al menos 16 o 17 pero se hacen múltiples operaciones con el consentimiento de los padres antes de los 18 años.
Abrazos.
...Me había quedado un comentario "precioso" pero no sé dónde le he dado a la tecla que se ha borrado...
ResponderEliminarCierto que podría escribirlo de nuevo pero... reconozco que a estas horas y desvelado desde las..., va a ser que no!
Pero no quería dejar de señalar mi presencia por aquí... :)))))
Abrazos Mara.
Je, je, Ernesto, me habría gustado leerlo pero así queda muy bien, desvelado y todo lo importante es que pases por aquí.
EliminarUn abrazo agradecida.
Una buena táctica la de este hombre el dejar que discutan madre e hija.
ResponderEliminarLos extremos en ninguna cosa es bueno.
Saludos.
Sí, Tomás, muy buena porque a veces se lían más las cosas si se interviene y más en estos casos que cada vez se dan más, que no eres el padre y te lo pueden echar en cara en un momento así.
EliminarUn saludo.