Como no quiero pensar en la guerra. "A toro pasado" hablaré del Carnaval. Ayer en una terraza nos encontramos con Irene y Carlos, nuestros vecinos durante los siete años que vivimos en La Bañeza. Recuerdo con afecto los carnavales en esa pequeña ciudad donde los disfruta todo el mundo desde los más pequeño, pasando por jóvenes y adultos hasta mayores de 80 años, que se disfrazan y viven la fiesta no sólo de desfiles, que también, sino a cualquier hora en la "Noche de Chispas", en la "Noche Bruja", por la tarde, por la noche o de madrugada.
Irene me preguntó: ¿Te acuerdas del hijo de Tere? S, sí _contesté.
_Pue un año en Carnaval acabó en el cuartel . _¿Cómo? Sí como te lo cuento. Uno de los días estaba el chico con otros dos veinteañeros amigos sentados en un banco después de haber visitado "El Mojao" (barrio bañezano, para distinguirlo de El Húmedo de León, ciudad). Los tres iban disfrazados del Séptimo de Caballería con su traje azul, hombreras, botones dorados, el pañuelo amarillo, su correaje y espada... en fin muy chulos. Bien, pues apareció por una bocacalle una pareja de la guardia civil y los jóvenes discutían si serían de verdad o irían disfrazados. El hijo de Tere saltó del banco diciendo: Ahora lo sabremos. Fue directo a una papelera, la estampó contra el suelo y esparció el contenido por la acera. Los guardias fueron hacia él con cara seria.
_¡Pero, qué has hecho! Enséñanos tu carnet. Sí, claro _dijo el joven_, son los municipales los que cuidan del orden. ¿Esas tenemos, eh? _dijo uno de los guardias_ pues, además, nos acompañas por desacato a la autoridad.
_¿Autoridad? ¿Y mis galones de Capitán del Séptimo de Caballería, qué? Los guardias lo agarraron cada uno por un brazo y se lo llevaron al cuartel. Detrás tuvieron que ir sus amigos a atestiguar en su favor que todo fue una broma para salir de dudas, pues pensaban que no eran de la benemérita de verdad. Además, se comprometieron a colocar la papelera en su sito y dejar todo como estaba.
Carlos que estaba muy callado saltó: ¡Cómo el borracho del chiste!
_Cuéntalo _añadí_ que se te dan muy bien. No se hizo de rogar. Lo resumiré, porque tardó diez minutos en contarlo. Haciéndose el borracho comenzó:
_Pues iba yo por una calle y venía un toro... ¡PERO YO VEÍA DOS TOROZ! Eché a correr y vi una ventana con rejaz... ¡PERO YO VEÍA DOS VENTANAZ! Ahí se calló haciéndose el interesante y piqué preguntándole: ¿Y qué pasó?
_Qué pazó...? que pazó...? Que... me zubí a la ventana que "No era" y vino el toro "que zí era" . Aún me da la risa cuando lo escribo.
A pesar del panorama, a gozar que la vida es muy corta: "Acuérdate que eres polvo y en polvo te convertirás".
Nos merecemos sonrisas: "A nadie se le dio veneno en risa" de Lope de Vega.
Una buena anécdota para contar siempre, 😂 al fin y al cabo eran chavales con ganas de pasar un buen rato.
ResponderEliminarSeguro que los petirrojos te traerán suerte, ya sabes 😃.
Un fuerte abrazo.
Pues sí Juan como se suele decir: "En Carnaval todo val"-
EliminarEso espero de los petirrojos. Abrazo.
Una buena anécdota nos sirve para mejorar este día a día tan poco halagüeño con lo que está pasando por el este de Europa.
ResponderEliminarBesos.
Sí, Alfred, las consecuencias de lo que está pasando son impredecibles. Algunas ya las estamos notando. Que acabe pronto.
EliminarUn abrazo.
No voy a decir que la anécdota del joven es tan graciosa como el chiste del borracho pero ambas tienen su aquel.
ResponderEliminarSaludos.
Tomás, los tiempos no están para muchas risas porque al paso que vamos estaremos tristes mucho tiempo, pero seamos optimistas, no nos queda otra.
EliminarUn saludo.
A estas horas reír es magnifico, porque acostarse con este recuerdo garantiza sueño placentero. Gracias y abrazos
ResponderEliminarA pesar de todo hemos de seguir riendo Ester, que las desgracias las estamos viendo acercarse. Besos.
EliminarHoy me levanto contento, llueve y leo tu entrada.
ResponderEliminarSaludos
Gracias Emilio. Aprovechemos la sonrisa porque las lágrimas están cada vez más cerca.
EliminarSaludos.
¡Aúpa La Bañeza! Uy con la benemérita hemos topado aunque estén disfrazados.
ResponderEliminarBesines utópicos.-
¡Aúpa siempre! Y vivan los carnavales que nos traen una sonrisa, cuando tanto llanto hay en el mundo.
EliminarBesines de Cuaresma.
Una anécdota para recordar. Mejor con risas, es un momento, el actual, que es tan necesario encontrar una razón para reír que admiro tu valor para hacerlo y hacernos reír.
ResponderEliminarGracias.
Sí, Enrique, seamos valerosos para no contagiarnos de tanta desgracia como está sucediendo. Al paso que vamos ya nos están quitando las ganas de sonreír.
EliminarUn abrazo.
Una nota de humor es tan necesaria como un bálsamo con todo lo que pasa por Europa, con la otra pandemia.
ResponderEliminarGracias Mara.
Un abrazo.
Así es Franconeti. Ya son dos pandemias y la última mucho más triste porque sabemos quién la está provocando y nadie tiene un buen remedio.
EliminarUn beso.
Hola Mara, la verdad que la sonrisa que nos sale al leerte viene muy bien dado los tiempos que corren, graciosa la anécdota y el chiste también.
ResponderEliminarBesos.
A ti Piruja, gracias por leerme. Que los tristes últimos acontecimientos no nos alejen la alegría para siempre.
EliminarUN beso.
Jajajaja...que buenas las dos anecdotas, Mara, me has hecho reir, y en estos tiempos se agradece. Abrazote (y cuidao con la guardia civil)
ResponderEliminarGracias Castelo. No nos vamos a dejar arrebatar la sonrisa ni siquiera ante la guardia civil.
EliminarUn abrazo.
Hola hola Mara.
ResponderEliminarA los jóvenes, por "listos", su propia horma. :))))))
Ya lo del toro, para picar... Picaste!
Lo de la vida corta... Será la percepción de ahora, pues con 18... Todo un mundo por delante!
Ya lo del polvo... Mejor me callo pues no sé si es un truquito tuyo para cazar a despistados... :)))))) o has vuelto a picar...
Abrazos. Buen finde leonés!
Ernesto. Primer punto, toda la razón. Segundo punto, toda la razón, piqué.
EliminarEspero que sí los jóvenes en carnaval no piensan en la muerte aunque se disfracen. Esa frase es más para mí que para ellos.
Sí, mejor cállate, ja, ja. Nada de truco:
"pulvis es et in pulverem reverteris"
Un abrazo. Feliz miércoles.
sonrío te leo
ResponderEliminarentiendo
me gusta
un abrazo
casi viajero
Recomenzar, eres un verso encantador.
ResponderEliminarBESOSSSS.
Gracias Teresa. Un beso.
ResponderEliminarUn poco de humor siempre viene bien, Mara.
ResponderEliminarSalu2.
Gracias Dyhego, así es porque parece que cada vez vamos más serios por la vida.
ResponderEliminarUn saludo.
excellent post
ResponderEliminarGracias.
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