¡Yo soy!
Es Navidad, mi sombra sigue a dos pastorcitos un niño y una niña de unos cuatro años, que se suben y bajan de un banco del parque mientras las mamás charlan. La niña dice:
_Yo le he pedido a los Reyes Magos una bicicleta y me la van a traer.
_Ya, pero dijo Pablo que los Reyes son los padres y él es mayor, que va a primero _ comenta el niño.
_Nooo... ¿cómo van a ser los padres de los Reyes, si los Reyes tienen barba?...y son viejísimos... (a la vez que lo dice, levanta los brazos), pues si ellos son muy viejos, ¡Cómo van a ser sus papás los Reyes!.
El niño, que no ha pillado muy bien el razonamiento, dice a la pequeña rubia:
_Que sí, que son los papás, que Pablo es mayor...(igual que la niña antes, él eleva los brazos).
Las mamás se separan y se despiden. Los pequeños zagales se acercan a sus respectivas madres, la avispada "Ricitos de oro" dice a su mamá.
_¿Verdad que los papás de los Reyes son muy viejitos?
_Claro, son muy viejecitos _contesta la madre_se dice "viejecitos".
_Por eso vienen los Reyes y no sus papás. Pues Pablo dice que los Reyes son sus papás.
¡Enfants terribles! de P. Cavarni escritor francés.
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