¡Yo soy!
Es funcionaria. Vivía con su pareja en un piso. Se separaron. Dejó a su marido en el piso y se fue de alquiler..
¡No lo aguantaba! Dominante y controlador. Casi nunca le apetecía salir. ¡Sobre todo si había fútbol jugara quien jugara. Tele y más tele. Además se quejaba a menudo. Me duele esto, me duele lo otro... pero no le podía hablar de ir al médico porque se negaba. Estaba harta de oír contar batallitas de sus ex-novias y se plantó...
Pasaron tres meses. Ese día decidió pasar por su antiguo piso. Quería llevarse una "mañanita" de gran valor sentimental que la había tejido su madre. También quería saber cómo se las apañaba sin ella. Quizás ya tenía una sustituta. Llamó. Como nadie respondió a su llamada, decidió entrar con la llave que aún conservaba.
¡Lo que vio la dejó helada! Su "ex" no se encontraba en el piso. Los cacharros sucios estaban esparcidos por todas partes: encimera, mesa, fregadero... ¡Desorden y suciedad por doquier! Se puso a limpiar, aquello no era normal, su "ex" tenía sus defectos, pero era bastante ordenado y limpio.
Esperó a que regresara. Cuando lo vio entrar completamente desaliñado, comprendió que algo andaba mal. ¡Parecía que la miraba extrañado como "ido" ! Se quedó parado, pero sus manos temblaban y daba la impresión de que iba a caer hacia un lado.
_¡Soy yo, Beni, ni que hubieras visto una aparición! _no obtuvo respuesta. Llamó a un taxi y lo llevó al médico.
Diagnóstico: Parkinson. Se sintió algo culpable. Siempre pensó que esa enfermedad la sufrían personas mayores, nunca imaginó que su "ex" con poco más de 40 años, la padeciera.
Desde entonces lo cuida como si volvieran a ser pareja. Alguna vez le preguntan:
_¿Pero no os habíais separado?
_Sí, y separados estamos _contesta_ pero... ¿Por qué me dará por pensar que estamos más juntos ahora que lo estuvimos en mucho tiempo?
Mi sombra cree comprenderla: "No des a nadie lo que te pida, sino lo que entiendes que necesita, y soporta luego su ingratitud" de Unamuno.
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