viernes, 6 de noviembre de 2009

¡ PALABRAS Cuatro !



¡Yo soy!






Mi sombra la sigue confundida con las sombras de la tarde-noche. Es una joven negra, alta y bien parecida.

Aunque su amiga dijo: "Pensar por día" la "Noche trabajar no pensar" Los recuerdos vienen a su mente sin querer.

Tardó dos días en llegar desde la costa a León donde su amiga la esperaba. ¡Sin papeles, por supuesto! Pero eso ya no importaba. Después de la mutilación del clítoris siendo una niña, de la violación por parte de su propio padre, del viaje en "patera" que iba a durar seis horas y duró ocho días. Después de ver sumergirse el cuerpecito, sin vida de su pequeño, en las aguas a las que ella misma lo arrojó completamente deshidratado...

Después de eso... ya no quedaban lágrimas en sus ojos. Su amiga le regaló una minifalda y una camiseta muy escotada. Unas botas blancas de tacón que destacaban la piel negra de sus piernas y un bolso del color de la pintura de sus labios.

_Ahora _le dijo_ "sólo falta aprender las palabras cuatro, para la noche trabajar". Ella puso mucha, mucha atención.

Paseaba lentamente, se notaba que nunca había puesto tacones, por los alrededores del Palacio de Deportes recordando las "palabras cuatro". Un coche se paró a su lado y el hombre asomó la cabeza y la miró.

Ella las soltó: "Chopar quince, follar veinte". No hizo falta más, el hombre entendió muy bien, no importó que la primera estuviera mal pronunciada, señal de que era nueva, alargó el brazo y le hizo un gesto con la cabeza para que subiera.


A mi sombra vinieron unos versos de Sor Juana Inés de la Cruz:

¿Cuál será más de culpar,

aunque cualquiera mal haga,

la que peca por la paga

o el que paga por pecar?




2 comentarios:

  1. ¡Cuánta razón tenía Sor Juana Inés de la Cruz! lo peor de todo es que estas historias sean ciertas, me ha gustado mucho, besines.

    ResponderEliminar
  2. Gracias Olgui. ¡Pobre gente, menuda profesión! Megabesos.

    ResponderEliminar